Andén interior

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domingo, 3 de agosto de 2014

Tiempos lejanos

Tiempos lejanos,
cuando en el salón de clases,
pasabas al frente con tu inconfundible cabello desordenado,
y luego,
sonreías y cantabas quedito al pasar por mi banca.

Las mejores clases,
con risas acalladas,
y aquellas palomitas de papel multicolor,
volando con tu nombre.





Nadie más,
adornó el camino de mi casa al colegio,
con corazones pintados con gis blanco,
y misteriosas rosas frescas.

Tus palabras en el viento,
mientras escuchaba las mariposas de mi mente,
porque en realidad nunca dijimos nada,
y todo se quedó muy dentro.

¿Cuántos diálogos imaginarios soñamos?

viernes, 2 de septiembre de 2011

Renovación



Es parte de


Abraza la vida con los brazos
cuando el mundo está en el suelo
deja a un lado los miedos al camino
...desmontando cada pieza
haciéndolo desde el corazón

Deja fuera el cansancio
desarmando la soledad
siguiendo libre tus sueños
como cualquier persona que une sus pedazos
entre la locura y la razón

Es parte de haber estado un poco perdido
es parte de comenzar otra vez
es parte de usar los sentidos
y de estar consciente del vuelo por el mundo

Abraza la vida con los brazos
mientras transcurre el día
siguiendo libre tus sueños
como cualquier persona que une sus pedazos
haciéndolo desde el corazón

Cuando se rompe el tiempo
cuando te exiges
mira el interior de tu pecho
sabrás que él está ahí
hasta el fin

Es parte de haber estado un poco perdido
es parte de comenzar otra vez
es parte de usar los sentidos
y de estar consciente del vuelo por el mundo


Marilú por Nei Duclós



Hace tiempo recibí una gran sorpresa, cuando Nei Duclós (un periodista brasileño radicado en Florianópolis), me compartió este poema dedicado a una Marilú...es tan encantadora su letra que me divierte leerlo y releerlo una y ota vez.

Espero lo disfruten tanto como yo, y nuevamente  ¡Gracias Nei! :)


- Marilú -
Nei Duclós
 


Luego dicen
que todo está en
nuestra mente
eso sucede
cuando viene Marilú.

Ella llega con su sombrilla
amarilla por la tarde
su pie en un zapato
con un agujero
Ella nunca saluda.

Contrarresta el ruido
del balcón
su cabello rizado
flotando al viento
Ella mira hacia adelante.

Soy el poeta loco
que inventó a Marilú
lo digo para evitarla
así que se atraviesa
la calle sin notarme

Pero al doblar
la esquina, Marilú
gira el paraguas
locamente
Creo que es una señal para mí

Hay atajos
podría abrirles la puerta
una invitación contundente
que ella podría aceptar
una locura

Podría hablarle
sobre la luna
de las estaciones, y los duendes
¿Quién sabe lo que
haría todo el día?

Sé que no puedo
pensar
cuando veo a Marilú pasar
rumbo a la plaza

Tal vez un jugo
con la fruta de la pasión sería  suficiente
para mantener una conversación con ella
me serviría una copa amarilla
con una pajilla.

Ella estaría en la sombra
desde el balcón me observaría
entonces podría dormirme para siempre
envuelto en el dolor de no ver más a Marilú
que sólo vive en mis pensamientos.

jueves, 19 de mayo de 2011

Niña querida

Niña querida
(A mi hija mayor)

Aprendo de tí: tu fuerza, tu gran fortaleza y la lucha por tus sueños a pesar de los obstáculos y sin rendirte nunca.
Eres una joven muy valiente.


¡Mil Felicidades por este sueño... parecía inalcanzable!

Te amo, con palabras y sin ellas, con la mirada, con el pensamiento, con el corazón y con toda mi alma.

miércoles, 20 de abril de 2011

Para Dani girl :)


Dani, cuando pienso en tí recuerdo la canción que solíamos cantar con tu hermana, mientras conducía en esas tardes de carreteras rumbo a la casa de Fortín.

El aire se llevaba nuestros cantos y risas, pero mi mente los aprisionaba para traerlos siempre conmigo en mis recuerdos.
Te amo niña de mi corazón.




domingo, 26 de diciembre de 2010

Antonieta




Antonieta


Algún secreto abrigas ya, tú que eras nuestro espejo cristalino.

La sonrisa más bella que jamás haya visto en rostro alguno,
brillaba como estrella en tí.  

Tú alegría contagiosa, las ocurrencias más originales, las risas como cascadas, las largas pláticas en las madrugadas veraniegas, mientras yo leía tu libro de Demián, y tú resolvías los intrincados secretos de las venas y las arterias del universo humano.

Antonieta con sus largos cabellos negros y brillantes, todos llenitos de florecillas rojas, que cortábamos en los caminos cercanos a tu casa.

El minino ronroneando a tu lado, esquivo a mis llamados y con esa libertad de la que hacías gala, declarándote seguidora suya.

La jaula de canarios al final del pasillo, y mi curiosidad constante en sus nidos y crías. 

La música surgiendo siempre, los cantos juntas, las noches calurosas meciéndonos en las hamacas mientras inventábamos nuevas letras.

El 24 de diciembre es un bello día para decirnos adiós, querida prima.  Bien decías, un día especial para iniciar la vida y otro muy significativo para decirnos adiós. Recorrí por vez última el camino a tu casa, mis lágrimas no son suficientes entre tantos recuerdos agolpados en mi mente, y abrigados en mi alma.

Algún secreto abrigas ya, tú que eras nuestro espejo cristalino. Lo he cubierto de florecillas rojas, como te hubiera gustado siempre.



lunes, 6 de septiembre de 2010

Tiempo

Tiempo.



Algunas veces cuando duermes,
no ves que a tus pies me desvelo,
con cada latido de tu corazón,
y en tu sofocada respiración de invierno.

Cuando me desborda el cansancio en esos días,
y me descubres agotada en demasía,
no creas que abandono por instantes,
mi puesto a tu lado niña mía.

En las épocas de paz y cielos transparentes,
y de prolongadas ausencias hospitalarias,
dices cuando me disgusto,
que soy injusta al ser tan dura,
por exigir de quien se esfuerza tanto.

Pero la persistencia en tus sueños,
y el no darte por vencida de luchar en esta vida,
hoy a pesar tuyo, reafirmo y te enseño.

Creciste junto a mis árboles y mis plantas,
el jardín de la casa siempre fué todo tuyo.
 
Descubriste sus veredas jugando en cada rincón,
trepaste en el árbol florido o en el árbol desgajado,
y construíste esos castillos infranqueables al paso,
con el lodo de todas las lluvias en Fortín.

Pisaste los charcos y las tierras anegadas a la vista,
mientras saltabas riendo, cuando ensuciabas todas tus ropas,
y corrías alegremente para inventar una más de tus travesuras.

Destejiste tus largos cabellos en el viento fuerte,
que rondaba el jardín agitando los ramajes,
y trajiste a las muñecas de tus juegos,
persiguiendo las fantasías de tus cuentos infantiles.

Y sin que pudiera evitarlo,
lloraste…cuando llegó tu tiempo.

Dices que me amas,
y eso me transforma la existencia,
arropas mi corazón con frases de dulzura,
y voces de eterno amor.

En otras tantas, sé que me aborreces,
y en esos instantes me partes el alma,
pero si te desvías (y te lo digo siempre),
sabes que lucharé y te regresaré a la vida.

Llegado el día cuando la luna desaparezca en el horizonte,
mientras el viento toca insistentemente mi puerta,
sérá el momento de nuestra despedida.

Sonreirás buscando el sol resplandeciente,
y seguirás tus sueños desbordantes,
tejiendo y soñando con tu vida independiente.